Víctima de Jeffrey Epstein testificó contra Ghislaine Maxwell. Acaba de fallecer

PALM BEACH – Una mujer cuyo testimonio fue clave para la condena penal por tráfico sexual de Ghislaine Maxwell murió de una sobredosis de drogas, confirmaron las autoridades.

Carolyn Andriano, de 36 años y madre de cinco hijos, fue encontrada muerta en un hotel del Condado Palm Beach, declaró su madre Dorothy Groenert. Aunque su muerte se descubrió el 23 de mayo, no se hizo pública sino hasta esta semana en un reportaje de Daily Beast.

Groenert, sin embargo, cuestionó las conclusiones del forense y la exhaustividad de la investigación de la policía de West Palm Beach.

Nadie no pudo obtener el reporte de la policía y del forense el lunes. Pero el abogado de Andriano Jack Scarola dijo que confiaba en los hallazgos relacionados con su muerte.

“Una madre angustiada está respondiendo emocionalmente. Estoy muy seguro de que está sufriendo una reacción de duelo tan importante”, dijo Scarola.

“Carolyn estaba pasando por un momento muy difícil después de su experiencia en Nueva York”, dijo Scarola, refiriéndose al testimonio de Andriano contra Maxwell en el tribunal federal de Manhattan en el juicio de tráfico sexual de Maxwell en diciembre de 2021. Dijo que ella continuó teniendo problemas con las drogas después del juicio.

“Se sabe que las experiencias de Carolyn con Jeffrey Epstein tuvieron un enorme impacto en su vida y claramente fueron la causa de su trágica muerte”, dijo.

Andriano no es la única víctima de Epstein que murió como consecuencia de una adicción. En 2018, Leigh Patrick fue encontrada muerta de una sobredosis accidental de drogas en otro motel de la Florida. Patrick también había sido abusada por Epstein cuando tenía 16 años.

“Mi hermana sufrió tremendamente”, le dijo Selby, la hermana gemela de Patrick, a DailyMail.com en una historia de 2019. “Y empezó con Epstein. Algo sucedió en ella cuando lo conoció que la descontroló”.

“Ella luchó con la adicción desde el momento en el que conoció a ese tipo. Fue a rehabilitación varias veces y luchó mucho, pero al final sucumbió a la adicción. La extrañamos”.

Scarola dijo que, cuando terminó el juicio, Andriano y su esposo John Pitts se mudaron a Carolina del Norte para empezar de nuevo. No estaba seguro de por qué se encontraba en Palm Beach en el momento de su muerte, pero varias fuentes afirmaron que seguía sumida en la adicción y que había acudido a Palm Beach para recibir tratamiento. Se alojaba en el hotel DoubleTree con su esposo y sus hijos en el momento de su muerte, dijeron las fuentes.

Durante el juicio de Maxwell, Andriano, quien solo fue identificada por su nombre de pila, dijo que fue llevada por primera vez a la mansión de Jeffrey Epstein en Palm Beach cuando tenía 14 años. En ese momento, había abandonado la escuela secundaria y había tenido una infancia difícil. Dijo que un pariente mayor abusó sexualmente de ella cuando tenía 4 años y que su madre era alcohólica. Por aquel entonces, ya consumía drogas.

Fue presentada a Epstein y Maxwell por Virginia Giuffre, otra víctima de Epstein.

Andriano testificó que volvió a casa de Epstein más de 100 veces para que le pagaran dinero, el cual usaba para comprar drogas.

Describió con lágrimas en los ojos el trauma que sufrió en los años posteriores, diciendo que le diagnosticaron esquizofrenia y que vivía con el temor de que secuestraran a sus hijos.

Andriano le dijo al jurado que Maxwell y otro socio de Epstein la citaban dos o tres veces por semana para visitar a Epstein, un financiero de Nueva York que murió en la cárcel a la espera de juicio por cargos de tráfico sexual en 2019. Su muerte fue declarada suicidio por ahorcamiento.

“Algo sexual ocurría cada vez”, dijo durante el juicio.

A preguntas de los abogados de Maxwell, Andriano dijo que había recibido $2.8 millones en compensación del patrimonio de Epstein como parte de un fondo de compensación creado para las víctimas.

“Pero”, dijo, “nada de dinero arreglará lo que me pasó”.

Fue una de las cuatro víctimas que testificaron en el juicio de Maxwell. Maxwell, de 61 años, fue condenada a 20 años de prisión por tráfico de personas. Está cumpliendo su condena en la prisión federal de mujeres de Tallahassee mientras apela su condena.