Talibanes se reúnen con representantes de la UE y EE.UU. para sacar a Afganistán de su aislamiento

La portavoz de la UE, Nabila Massrali, sostuvo que es un intercambio informal, que «no constituye un reconocimiento del ‘gobierno interino'».

DOHA – Los talibanes están reunidos con representantes de la Unión Europea (UE) y Estados Unidos este martes en Doha, en un esfuerzo diplomático por sacar a Afganistán de su aislamiento internacional.

Los afganos ya se han reunido con representantes del gobierno alemán y con un parlamentario británico, aseguró el ministro interino de Relaciones Exteriores de Afganistán, Amir Khan Muttaqi en un evento organizado en el Centro de Conflictos y Estudios Humanitarios de Catar.

«Queremos tener una relación positiva con todo el mundo. Creemos en relaciones internacionales equilibradas. Creemos que dichas relaciones equilibradas pueden salvar a Afganistán de la inestabilidad», agregó.

El encuentro tendrá lugar en Doha y contará también con representantes de Estados Unidos, indicó la portavoz de la UE, Nabila Massrali, sin precisar el número ni las funciones de los enviados europeos.

«Se trata de un intercambio informal, a nivel técnico. No constituye un reconocimiento del ‘gobierno interino'», añadió.

Según la portavoz, el intercambio debería «permitir a Estados Unidos y a los europeos abordar problemas» como la libertad de desplazamiento para las personas que quieran salir de Afganistán, el acceso a ayuda humanitaria, los derechos de las mujeres o impedir que el país se convierta en un santuario para grupos «terroristas».

Detener un «hundimiento»

La UE busca prevenir un «hundimiento» del país asiático, dijo el jefe de la diplomacia europea, el español Josep Borrell, al salir de una reunión ministerial.

«No podemos contentarnos con mirar y esperar. Tenemos que actuar, y rápidamente», añadió.

Los talibanes están urgidos de aliados ante la compleja situación de la economía afgana, afectada por el corte de la ayuda internacional, el aumento en el costo de los alimentos y el creciente desempleo.

Su gobierno, que no ha sido reconocido por otros países, también enfrenta la amenaza del grupo Estado Islámico-Khorasan (EI-K), que ha realizado una serie de ataques mortales en el país.

Pero para la comunidad internacional, se trata de un equilibrio difícil dar respaldo a los afganos sin aparecer que apoya al gobierno talibán.

El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, urgió al mundo donar más dinero a Afganistán para evitar su colapso económico, pero también criticó el incumplimiento de las promesas de los talibanes sobre los derechos de las mujeres y niñas, tras los abusos cometidos durante su primer gobierno, de 1996 a 2001.