Mazda6 Signature 2.5T, 2019

El Latino de Hoy –
La sexta generación del sedán insignia de Mazda siempre ha sido una hermosura. Seguro, nunca tuvo tantos ornamentos como los demás, pero como entusiastas, agradecemos el implacable foco que Mazda pone sobre el manejo y la intervención del conductor, en lugar de darle importancia a los artilugios. Por suerte, ya no tenemos que poner esa excusa.

Para el 2019, el fabricante automotriz le ha dado al Mazda6 una renovación tan exahustiva que califica como un nuevo modelo. Viéndolo por fuera, se necesita de un buen ojo para notar todos los pequeños cambios que han hecho mucho más elegante a un sedán ya de por sí elegante. La nueva parrilla y el motivo “alado” saltan a la vista, pero usted no notará que Mazda ha integrado los faros antiniebla en los faros comunes y que ha eliminado la moldura negra de la parte inferior de la carrocería hasta que alguien se lo señale. Será más difícil detectar las nuevas luces traseras y el nuevo tubo de escape a simple vista, pero súmele a todo esto un juego opcional de ruedas de 19 pulgadas y ya tiene la metamorfosis sutil de una mariposa en otra más bella.

Interior
El interior está actualizado de manera significativa, salvo por unos pocos botones discretos, el controlador de infotenimiento y un volante y panel de instrumentos estándar tomados de la CX-9. El diseño es elegante, moderno y sofisticado, con énfasis en el uso de materiales suaves al tacto donde realmente podrá sentirlos. Incluso los modelos base tienen cuero sobre el volante y la palanca de cambios, y vienen con un esquema en dos tonos opcionales. El control de clima automático de doble zona llega de serie, así como la pantalla de infotenimiento de 8.0 pulgadas. Mejor aún, Mazda no escatima dinero para quienes viajen en el asiento trasero como algunos otros fabricantes. Todo el revestimiento, los materiales suaves y el detalle de las costuras llegan a las puertas traseras y los asientos.

Para cuando alcance el nuevo nivel de equipamiento Signature de primera categoría, a partir de los $35,100 dólares, se habrá hecho de un auto de lujo por el valor de un Camry. Más aún, la única forma de subirle el valor a un Signature es pedirlo en un color sofisticado y agregarle accesorios como redes de carga y cosas por el estilo.

El equipamiento, en un nivel inferior, incluye cosas como asientos con calefacción y aire acondicionado, head-up display, espejos con atenuación automática, volante con calefacción, asientos traseros con puertos USB, sistema de sonido Bose con 11 altavoces, ruedas de 19 pulgadas, luces altas y limpiaparabrisas automáticos, control de velocidad crucero adaptativo con capacidad para frenar y arrancar en el tráfico, advertencia de colisión, mantenimiento de carril, cámara de visión trasera y monitoreo de punto ciego. Además, obtiene cuero de primera calidad, terminados en gamuza, revestimiento de madera de sen hecho por un fabricante de guitarras japonesas, revestimiento interior del techo en color negro, una parrilla especial, una pantalla LCD configurable de 7.0 pulgadas en el panel de instrumentos, un sistema de cámaras de 360° y, por supuesto, el motor turbo.

El cuero es suave como mantequilla y parece estar por todas partes; el revestimiento de gamuza, de aspecto exquisito, está aplicado por doquier y, una refrescante sorpresa, cuenta con una moldura de metal real y finos detalles de costura como realce. Mazda ha incorporado una gran cantidad de material de insonorización, y vale la pena. Aunque no es la mejor de su clase en este aspecto, la cabina es mucho más silenciosa. La madera de sen, tan formidable como su trasfondo, tiene un acabado que le da un desafortunado lustre plastificado y no le hace honor a su procedencia.

Un punto destacado en particular: los nuevos asientos delanteros, que tienen algún tipo de espuma de la era espacial y un diseño que intenta orientar su pelvis y su columna vertebral como si usted estuviera de pie. Según Mazda, esto no solo es más cómodo sino que le permite tener un mejor equilibrio en el asiento, lo que reduce la necesidad de grandes apoyos laterales que lo sostengan en las curvas.

Conducción
La suspensión ha recibido un rediseño completo y sorprendente, lo que incluye nuevos amortiguadores con resortes de rebote interno, una nueva geometría que elimina el balanceo y subviraje y mejora el frente, y una cremallera de dirección con montaje rígido. El resultado: una calidad de andar y de manejo que describiría mejor como alemana. En otras palabras, este auto se mueve con una gracia y una sofisticación que por lo general se encuentra en los sedanes de lujo alemanes.

La suspensión absorbe y desvía suavemente las sacudidas, grandes y pequeñas. Así, parece que nunca registrara un impacto violento ya sea por vibración o por ruido. La carrocería se mueve de forma fluida y pausada, sin vuelcos hacia los costados ni corcoveos. Es calmada y tranquila; es imposible no tener un andar suave.

Al conducirlo, el Mazda6 se comporta de la misma manera. La carrocería se balancea un poco más que un sedán deportivo alemán, pero es un movimiento delicado y controlado que finaliza suavemente en vez de desplomarse sobre los topes de impacto. El peso se desplaza rápidamente hacia fuera y el auto se estabiliza tranquilamente. La dirección es rápida y precisa, aunque manejar 310 libras-pie de torque introduce algunos puntos pesados en el volante al salir de una curva y elimina toda sensación del camino.

A pesar de eso, puede llevar este auto por cualquier carretera muy, muy rápido. El factor limitante son los neumáticos: los que sirven para las cuatro temporadas, algo delgados, no tienen el agarre que este auto necesita. Al tener un frente pesado, el subviraje es el castigo cuando se les pide demasiado a estos neumáticos, y protestarán de forma audible antes de que esto ocurra. Mazda está buscando una opción de neumáticos de verano colocados por el concesionario. Es una buena idea. Al frenar a fondo, el frenado es consistentemente pesado, pero no es necesario hacer mucha fuerza sobre el pedal. Lleva cierto tiempo acostumbrarse.

Reconocerán este tren motriz que viene del crossover CX-9, más grande y pesado, y que llega aquí a estirar sus piernas. El motor turbo opcional de cuatro cilindros (el modelo base trae un motor con aspiración natural de cuatro cilindros de modelos anteriores, con desactivación de cilindros, 187 hp y 186 libras-pie de torque) pone todo el torque ahí abajo y termina con 2 valores nominales de potencia más altos: 227 hp en 87 octanos y 250 hp en 93 octanos. No se preocupe mucho por eso. Alcanza la potencia máxima a las 5,000 rpm, por eso, a menos que planee hacerlo, no notará la diferencia.

En el manejo cotidiano, este auto de seis velocidades mantiene la velocidad crucero gracias al torque de ese motor turbo y es muy potente para adelantarse a un conductor lento en la autopista. En Mazda dicen que no quisieron más de seis velocidades para ofrecer respuesta del motor y capacidad de manejo. Mantener las revoluciones altas y el turbo en movimiento significa que el motor no tiene que rebajar de novena a quinta para lograr potencia. El no tener una velocidad de sobremarcha superalta podría tener implicancias de ahorro de combustible, pero con 23/31/26 mpg en ciudad/carretera/terreno combinado, el Mazda6 compite a muerte con un Accord o un Camry. El motor base tiene un valor nominal de 26/35/29 mpg si la frugalidad es su prioridad.

De forma gráfica, la entrega de potencia luce como una sonrisa. Suceden muchas cosas en las partes inferior y superior del gráfico, pero no tanto en el medio. A velocidad crucero, hay mucha fuerza ni bien uno toca el pedal; al castigarla, hay buena tracción en la parte superior. Sin embargo, entre 3,000 y 4,000 rpm, la entrega se achata un poco, por lo que es mejor elegir un extremo del espectro y mantenerse ahí.

La transmisión lo ayudará con gusto en esa tarea. Tiene paletas de cambios y una ranura de palanca de cambios manual para carreras, que responden con rapidez, además de un buenísimo modo deportivo. No es tan bueno como una Porsche PDK, pero mantiene las velocidades y los cambios descendentes con agresividad al frenar. Es bastante buena como para no tener que usar las paletas todo el tiempo, pero si quiere ir a fondo, hágalo usted mismo. Los cambios en sí son suaves y tranquilos, excepto con el acelerador a fondo.

Un nuevo Mazda6 Signature es como «vivir bien y ahorrar dinero al mismo tiempo», una combinación que nunca pasa de moda.