Adicciones, escándalos y ahora con tremendo problema legal: La difícil vida de Julio César Chávez Jr., ex campeón mundial de boxeo

Va a ser deportado a México desde Estados Unidos.
CIUDAD DE MÉXICO – Julio César Chávez Júnior llegó a los más alto. Entre junio de 2011 y septiembre de 2012 fue campeón de peso medio del Consejo Mundial de Boxeo (CMB). Sin embargo, la vida da muchas vueltas y hoy se encuentra en un tremendo lío.
El escándalo explotó hace poco en Estados Unidos. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) informó que la visa de turista con la que ingresó el púgil estaba vencida y además se le acusó por su posible relación con el Cartel de Sinaloa, por lo que tiene una orden de arresto vigente en su país, México, por presunta participación en delitos de delincuencia organizada con fines de tráfico de armas, municiones y explosivos.
Julio César Chávez Jr. es hijo de una leyenda. Su padre homónimo es considerado por muchos como el mejor boxeador mexicano de todos los tiempos y uno de los mejores de la historia del noble arte de los puños.
«Nunca en la historia del deporte el mote de junior le había quedado tan grande a un atleta profesional. Malas compañías, abuso de sustancias, dopaje, fallas en la báscula, problemas de actitud, palizas y un sinfín de anécdotas terminaron por manchar el nombre más respetado del pugilismo nacional», publicó el diario el Universal. «
Julito», junto a sus hermanos, padeció el tormentoso divorcio de sus progenitores. La madre denunció violencia de genero y el padre, caído en desgracia por sus adicciones, protagonizaba un lío tras otro.
Así creció el «Júnior», en un ambiente complejo. El boxeo fue su refugio y decidió que fuese su carrera. Desde temprano mostró condiciones, ganó sus primeros 23 combates como profesional, pero en 2009 tuvo que lidiar con su primera polémica. Dio positivo por furosemida, un diurético para perder peso, y fue suspendido siete meses.
Dejó atrás ese castigo y en 2011 alcanzó el pináculo de su carrera. Derrotó al alemán Sebastian Zbik, invicto hasta ahí, para convertirse en campeón mundial.
En retrospectiva, fueron sus años de mayor brillo. Llamaba la atención de la prensa por lo que hacía en el ring, pero también fuera de él. Por esa época, comenzó una relación con Frida Muñoz, la viuda de Edgar Guzmán, hijo del famoso narcotraficante Joaquín «El Chapo» Guzmán.
La mujer lo comenzó a acompañar a sus peleas. Con el tiempo, se casó con el púgil y tuvieron dos hijos. «Julito», además, se hizo cargo de la crianza de Frida Guzmán, hija de Edgar y nieta del «Chapo».
Chávez Jr. defendió con éxito el cinturón de campeón mundial tres veces. Por un tiempo no estuvo a la sombra de su legendario padre. Hasta que en 2012 perdió con el argentino Sergio «Maravilla» Martínez. A partir de ahí inició su declive.
Lo multaron luego de dar positivo por marihuana y lo obligaron a retirarse hasta completar un tratamiento.
Volvió al ring, pero sin mucho éxito y realizó apenas cinco peleas en cinco años. En 2017 se enfrentó a Saúl «Canelo» Álvarez y dejó una pobre impresión.
Poco después, se enfrentó públicamente con su padre por obligarlo a ingresar a una clínica de rehabilitación.
Luego de un tiempo inactivo, en 2019 nuevamente entró al ring y lo noqueó Daniel Jacobs. Cada vez se iba adentrando más en la oscuridad. Abusaba de anfetaminas y ansiolíticos. Se dejó de hablar con su familia.
En 2021 perdió con Anderson Silva. Ese era el menor de sus problemas. En México se le abrió una investigación por delincuencia organizada y tráfico de armas. En 2023, se emitió una orden de captura, pero no se ejecutó porque la mayor parte del tiempo Chávez Jr. estaba en Estados Unidos.
La situación de «Julito» era cada vez más preocupante. Su comportamiento era muy errático. Por Instagram se peleaba con su esposa, la acusaba de secuestrar a los hijos del matrimonio. También disparaba contra su padre por haberlo internado.
«Eso (su padre) es una basura, como cuando golpeaba a mi mamá, ¡Es una basura! Yo me alejé de todos, pero no me dejan en paz. Me quieren matar, mi papá me está matando, la señora (su propia esposa) me ha querido envenenar. Los van a meter al bote a todos. A chingar a su madre todos, que paguen ellos, que los metan a la cárcel para que sepan lo que se siente», afirmó.
«Mi papá hizo pedazos a mi mamá, la golpeaba, la humilló, está traumada, ya no puede hacer nada. Quedó dañada para toda la vida por el mismo güey (Chávez) que me está dañando a mí, pinche abusón que dice que me quiere ayudar a mí», añadió.
A principios de 2024, en EE.UU. lo detuvieron por porte ilegal de armas. Pasó tres noches en la cárcel.
«Tenía miedo que se matara», llegó a decir su progenitor.
Pero «Julito» comenzó a mejorar. Al menos eso parecía. Dijo que no estaba consumiendo drogas y volvió a entrenar. Hace poco peleó contra el youtuber Jake Paul y perdió.
Más allá de la derrota, que le valió punzantes críticas de los aficionados, su familia se ilusionaba con que fuese un nuevo comienzo para él. Sin embargo, actualmente está esperando que lo deporten a México para enfrentar a la justicia.
El mexicano Jorge «Travieso» Arce, otro ex campeón mundial, conoce a la familia Chávez. Dijo estar triste y preocupado por «Julito».
«Yo estoy muy triste, me tocó convivir mucho con él y realmente es un buen muchacho. Se me hace una persona noble, de buenos sentimientos. Qué lástima que se haya desviado del camino cuando tenía todo para ser un gran campeón», aseveró.
Arce, además, dejó una advertencia: «Cuando te metes en las drogas, solo hay tres caminos: la cárcel, quedarte solo o el panteón. Qué triste que Julio haya escogido ese camino malo».
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